Cuando habla con un cliente por teléfono o en persona, es importante tener una buena comunicación con él y comportarse de forma profesional. El profesionalismo y las buenas aptitudes para la comunicación aumentan la credibilidad de cara al cliente.
Si habla con el cliente en persona, este puede ver su lenguaje corporal. Si habla con el cliente por teléfono, este puede escuchar si suspira y suponer que lo está tratando con deferencia. A la inversa, los clientes también pueden darse cuenta de si sonríe cuando habla con ellos por teléfono. Muchos técnicos de centros de atención telefónica poseen un espejo en el escritorio para ver sus expresiones faciales.
Los técnicos exitosos controlan sus reacciones y emociones de la llamada de un cliente a la siguiente. Una buena regla para todos los técnicos es que un nuevo cliente es un nuevo comienzo. Nunca lleve la frustración de una llamada a la siguiente.